LA NOCHE, MOMENTO PARA APRENDER

 

Tres cosas puedo hacer en el momento de la oración de la noche:

 

1. Doy gracias

 

Durante el día he recibido mucho, he trabajado, he vivido nuevas experiencias, he disfrutado de la amistad, quizás me he encontrado con nueva gente... Es el momento de dar gracias a Dios, que ha actuado con su ayuda directamente en mí o a través de segundas causas. Y por encima de todo porque he sentido el gozo de haber conocido a Jesús de Nazaret y ser su discípulo.  

Gracias, Gracias, Padre Dios.

 

2. Pido perdón

 

Sin duda, en el día de hoy, ha habido muchas equivocaciones, muchos errores y pecados. Es el momento de hacer un breve examen y descubrir cuáles han sido mis inconsecuencias más claras, es decir en qué momentos no he sido fiel a los criterios y valores del Maestro.

 

3. Aprendo y me programo  

 

Saco conclusiones: he fallado en esto y en esto otro. debo actuar de forma distinta. ¿En qué debo cambiar? ¿Qué me han enseñado mis experiencia? ¿Qué lecciones me ha dado la vida? 

¿De ahora en adelante cómo debo actuar? ¿En qué tengo que cambiar? ¿Qué comportamiento tengo que invertir? 

 

Puedes hasta tomar nota  de todas tus reflexiones en un cuaderno.